Más de 60 personas se prendieron ayer a la mañana a conocer los recovecos más ingleses de Echesortu. La iniciativa, que se realizó por primera vez, se impulsó desde el grupo de Facebook “Pueblo Echesortu” y buscó mostrar la parte “brit” de uno de los barrios más emblemáticos de la ciudad.
Roberto Trapé es arquitecto, creció en el barrio y sigue viviendo en él, con un “breve impasse” viviendo en el centro hace unos años, y comenzó a aportar su sabiduría sobre el barrio en un grupo de Facebook que compartía con otros administradores. Hace dos años armó por su cuenta el grupo “Pueblo Echesortu”, que hoy tiene casi 4 mil miembros y administra junto a Jésica Contreras Galarza y la guía turística Norma Cardozo.
Contó que a raíz de sus aportes, empezaron a llegar comentarios y saludos de nativos de Echesortu que emigraron a distintos lugares del mundo: “Una vez me escribió una chica que vivía en Australia y que nació en el barrio. La gente se prendió”.
El recorrido duró alrededor de dos horas, donde no sólo hubo historia y anécdotas del barrio sino también mucha arquitectura y detalles para conocer uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Comenzó en la esquina de Córdoba y Vera Mujica y finalizó, después de hacer hincapié en la influencia de la familia Jewell y en la sociedad Echesortu-Casas (conformada por Ciro Echesortu y Casiano Casas), en el museo del Club Atlético del Rosario.
“Echesortu es un barrio que no tiene fundador, tampoco tiene fecha de fundación y que, catastralmente, dejó de existir en 1950. Estamos en una especie de empecinamiento de la gente de seguir llamando Echesortu a lo que, oficialmente, es Remedios de Escalada de San Martín”, dice con gracia Trapé.
En la cuadra de Córdoba al 3200, el grupo estuvo un buen tiempo contemplando lo que fueron “las 10 casas Jewell”: una hilera de construcciones idénticas (cortadas sólo por un chalet, más cerca de la esquina de Crespo) que fueron encargadas por los Jewell para el personal jerárquico del ferrocarril de entonces.
Trapé relató, entre las particularidades de las edificaciones, que en una de las casas que pertenecieron a Carlos y Eduardo Jewell se instaló uno de los primeros teléfonos en la ciudad.
A raíz de este comentario, el arquitecto explicó: “Samuel Jewell, padre de ellos, era socio de Davis, quienes fueron los primeros que hicieron una exportación de trigo a Liverpool”.
En estos personajes en particular se detuvo Trapé para mencionar la influencia de Plaza en la ciudad: “La sede principal estaba donde hoy está el colegio San José (Salta y Roca). A medida que pasaba el tiempo, se fueron agregando deportes y no tenían tanto lugar, por lo que los hermanos Jewell consiguen el predio que está acá (en referencia a Córdoba y Crespo)”.
“Es un predio fundacional tremendo para una ciudad como Rosario. Acá se jugaron los primeros partidos de fútbol; el primer clásico rosarino de la era no profesional; los primeros partidos de tenis, mucho antes de que se fundara el Buenos Aires Lawn Tennis; se hicieron las primeras carreras de natación y hasta se jugó al polo”, detalló Trapé.
La caminata siguió por otros lugares emblemáticos, cada uno con su explicación y su historia, sobre todo por calle Burmeister (paralela a Córdoba al 3300) y el pasaje Gould. De la experiencia, Trapé llamó a “tomar los espacios públicos de nuevo” y a replicar esta experiencia en otros barrios.
FUENTE: Tomás Barrandeguy – www.lacapital.com.ar