El reconocido arquitecto de Mar del Plata, Roberto Cova, falleció este sábado a los 91 años, lo cual generó una profunda conmoción en una ciudad en la que dejó una huella imborrable.
Cova había nacido el 23 de agosto de 1930 en la ciudad y se recibió de aquitecto en la Universidad de Buenos Aires en 1954. Fue profesor de la Escuela Nacional de Educación Técnica y del Colegio Pablo Tavelli. También ocupó diversos cargos en la facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Tras conocerse la noticia, el Consejo Directivo del Colegio de Arquitectos de la provincia de Buenos Aires Distrito IX expresó “su profundo dolor por el fallecimiento de uno de los más destacados profesionales y referentes de la ciudad.
“Gracias a su enorme generosidad dos de sus propiedades pasaron al dominio de esta institución y el mejor homenaje que el Capba 9 puede ofrecerle es la preservación y promoción histórica y cultural de su vivienda ubicada en la calle 14 de Julio y lo que fue el taller de carpintería de su padre, en la arteria Funes. Esta tarea ya está en marcha con la puesta en valor de esté último predio, donde el Colegio ofrecerá un lugar de actividades sociales y culturales para su matrícula y toda la sociedad y su casa como biblioteca/ museo abierta a investigadores y curiosos de la arquitectura como le hubiera gustado”, señalaron las autoridades.
A su vez, recordaron que Cova fue miembro fundador del Gabinete de Estudios Históricos Regionales y de la Asociación Marplatense de Arquitectos. Docente e investigador incansable, constituye la memoria viva de Mar del Plata. “Fue colaborador en innumerables publicaciones, suplementos, revistas y editoriales; y es autor de numerosos libros que reflejan su cariño por esta localidad, por las historias de vida, por el crecimiento urbano y los personajes que construyeron este sector del suelo bonaerense”, indicaron.
En su extensa trayectoria, el arquitecto fue Asesor Histórico Honorario del Museo Villa Mitre y en 2000 fue declarado Ciudadano Ilustre de Mar del Plata. “A través de sus investigaciones y de la difusión de su obra ha realizado un importante aporte a la preservación de la historia marplatense, ayudando a numerosos sectores y vecinos a redescubrir su pasado y con ello, a construir su identidad cultural”, afirmaron las autoridades del colegio.
Finalmente, destacaron: “El legado que deja en los historiadores de varias generaciones con quienes siempre colaboró y para toda la comunidad es invaluable. Hoy nuestra comunidad pierde uno de sus ciudadanos más queridos, un incomparable relator de su historia, tenaz defensor del patrimonio urbano/arquitectónico y de la cultura material de la que siempre fue su ciudad”.
FUENTE: www.0223.com.ar