Las imágenes más futuristas las muestran tecnológicas, amplias y, en muchos casos, extravagantes. Sin embargo, la proyección que los argentinos hacen de las casas del futuro es mucho más simple: las imaginan parecidas a las de ahora, pero mucho más sustentables y amigables con el ambiente. Así surge de un estudio realizado por la consultora especializada en investigación de mercado YOUniversal y la empresa de grifería de alta tecnología FV, al cumplirse 100 años de su nacimiento.
Una de las conclusiones más importantes a las que arribó el estudio se relaciona con la creciente preocupación que existe en torno al cuidado del medio ambiente. Entre 17 hábitos sustentables mencionados, los encuestados respondieron que realizan en promedio el 50%. La mayoría asegura que hace un uso más consciente del agua, la electricidad y el gas, consume alimentos de productores locales y elige la bicicleta en lugar de otros transportes. No obstante, solo uno de cada tres argentinos está de acuerdo con que lleva un estilo de vida muy sustentable. El resto, si bien lleva a cabo algunas acciones en su cotidianeidad, lo hace con menor frecuencia.
Para la mayoría de los encuestados, en los próximos años, las ciudades tendrán más espacios verdes, que compensarán la mayor polución que se estima que habrá. Por otra parte, el 83% cree que el transporte y la movilidad eficiente serán una de las claves en el diseño urbano; el 82% piensa que el cuidado de los recursos ambientales será muy importante y el 77% considera que habrá cada vez más interacción digital y por voz en todos los espacios.
Al momento de imaginar los problemas de la ciudad en los próximos años, las preocupaciones se acercan a los desafíos del presente: la gestión de residuos, la reducción de la violencia y la falta de espacios verdes. A la hora de priorizar los problemas planteados, los argentinos consideran que los principales son el acceso al agua potable, su uso eficiente y la gestión de residuos.
¿Cómo serán las casas del futuro? El 80% de los encuestados cree que el cuidado de los recursos ambientales será clave y determinará el uso que se haga de los mismo. A su vez, el 77% considera que las viviendas estarán más automatizadas en climatización e iluminación y el 76%, que la polución y los problemas ambientales obligarán a hacer cambios en nuestras casas. Los espacios interiores estarán menos estructurados, serán menos específicos y más multifuncionales. Los encuestados creen que los problemas serán similares a los de la ciudad: la falta de espacios verdes, la gestión de residuos, el acceso y el uso eficiente de agua y también el hacinamiento.
Para Diego Viegener, gerente comercial de FV, la domótica va a estar cada vez más presente y va a ser la regla en las casas del futuro. “Se va a aplicar a un montón de soluciones como la electricidad y la grifería, por ejemplo. Más allá de la casa en sí como edificio, creo que lo que va cambiar son los hábitos de las personas que habiten la vivienda, como la concientización del uso del agua, de tener una huerta, una compostera y de repensar la alimentación y la conexión entre cuerpo mente y espíritu”, agrega. A su vez, Claudio Bernal, gerente de promoción de la compañía pone sobre la mesa un dato interesante: “Las viviendas sustentables cada vez van a valer más en el mercado porque son las que ahorran más recursos”.
Consultado respecto a las acciones que lleva a cabo la empresa para adaptarse a la demanda de productos más sustentables, Viegener cuenta: “En nuestra fábrica tenemos dos plantas que hacen distintos procesos de tratamiento de afluentes y gaseosos. Desde que nace el producto, lo fabricamos y comercializamos hasta la posventa tenemos en nuestra cabeza el cuidado de todos los recursos naturales”.
En conclusión, el estudio refleja una aspiración en relación a vivir de un modo más sustentable. En base a las respuestas de los encuestados, desde FV aseguran que “los argentinos comienzan a comprometerse con esos hábitos, pero entienden que hay que profundizar en otros que aún tienen arraigados y van en sentido contrario”. Existe un consenso respecto a que la conducta individual tiene un impacto en el ambiente, por lo que las casas del futuro serán más sustentables que las ciudades.
FUENTE: Delfina Casali – www.lanacion.com.ar