Pasaron 15 años desde el fallo Mendoza, la histórica sentencia judicial de la Corte Suprema de Justicia que determinó la responsabilidad del daño ambiental en la Cuenca Matanza Riachuelo en cabeza de los estados nacional, provincial, de la CABA además de 44 empresas. Desde entonces, la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), creada por Ley 26.168 a raíz de la demanda judicial, tiene la obligación de mejorar la calidad de vida de la población de la Cuenca, recomponer el ambiente en todos sus componentes (agua, aire y suelo) y prevenir los daños de forma razonable.
En el marco de ese proceso, este miércoles se llevó a cabo la quinta audiencia pública para debatir un plan estratégico que avance sobre los objetivos del organismo, en base a una propuesta plasmada en el documento “Restauración Ecológica de la Cuenca Matanza Riachuelo”, que apunta a la posibilidad de recuperar la flora nativa y la restauración ecológica. Claro que el plan de acción venidero dependerá de la inversión de Nación, CABA y Provincia, algo que hoy suena disímil ante los pronunciamientos de La Libertad Avanza sobre la falta de fondos y la búsqueda de prioridades que parecen estar lejos de lo ambiental.
Audiencia pública en un sitio de memoria
La apertura de la audiencia tuvo lugar a las 10 de la mañana en el Polideportivo Municipal Gorki Grana – Casa de la Memoria, en la localidad de Cautelar (Morón). En su inicio, se explicó que el objetivo del encuentro era la consulta ciudadana del documento puesto a disposición en la web de Acumar. Estas audiencias son abiertas al público, quienes tuvieron un plazo de inscripción y la posibilidad de leer de forma previa del expediente así como de participar de manera presencial o virtual. Las opiniones no son vinculantes, es decir, obligatorias para Acumar. No obstante, las preguntas pertinentes y las sugerencias permiten al organismo ajustar la planificación con una mirada integral.
Durante la apertura, Viviana Cabrera, secretaria de Derechos Humanos de Morón destacó que el predio donde se realizaba el evento fue reconstruido por medio de un proyecto antropológico como espacio de memoria. El excentro Clandestino Mansión Seré había sido derrumbado: “Es importante destacar que nos encontramos en un espacio que se ha transformado en territorio de memoria y disputa de sentidos, con los nombres y nomenclaturas de las calles en su interior, conformándose en un lugar de memoria y vida”.
La biodiversidad puede volver a la Cuenca
“La restauración ecológica que proponemos en el documento de consulta tiene que ver con empezar a plantearnos cuestiones de reinserción de biodiversidad en la cuenca”, dijo el director de Participación Social de Acumar, Fabio Márquez, quien presidió la audiencia. El director expresó que en 2021, la Organización de Naciones Unidas (ONU), definió la importancia de restaurar los ambientes ya que contar con ecosistemas saludables “es la única forma de mejorar los medios de subsistencia de las personas, contrarrestar el cambio climático, y detener la pérdida de biodiversidad”, señaló.
En este sentido, Márquez expresó que la restauración ecológica que requiere la cuenca tiene que ver con mejorar la calidad de vida de las personas. “No solo tiene que ver con conservar lo que tenemos, lo que queda de paisaje original, sino de renaturalizar espacios antropisados, mayormente urbanos pero también agropecuarios”, aseveró, y aclaró que no significa “llegar a sistemas originales prístinos sino restaurar las relaciones ecosistémicas que mejoren la calidad del hábitat para la salud ambiental, de las personas y atenuar los impactos del cambio climático como las olas de calor, recuperando la biodiversidad que perdimos”.
Más flora nativa
Para Márquez, incrementar la presencia de flora nativa es el soporte por el cual se podrá reinsertar la biodiversidad: “Hay que impulsar los procesos de sucesión ecológica para que se puedan acelerar la restauración de la flora con bosque y fauna silvestre y se empiecen a armar los corredores ecológicos, que se vayan dinamizando con el río y sus 64 arroyos más los humedales«.
En este sentido, Márquez destacó que la propuesta de Acumar incluye un plan para plantar las especies correctas en los lugares correctos. “La Cuenca tiene diversidad de ambientes, de ecosistemas, tanto de los que hay que conservar como los que hay que restaurar, entendiendo las tensiones humanas que tienen presión sobre estas cuencas”, manifestó.
Asimismo, dijo que la limpieza del margen del Riachuelo y la liberación del Camino de Sirga, así como la recuperación de nuevos espacios verdes en las riberas de arroyos son una posibilidad de disfrute humanos pero también para el entorno de biodiversidad.
Como ejemplo de acciones en este sentido, mencionó el inventario de humedales que trabajó Acumar con el Conicet así como las experiencias de restauración con flora nativa de dos basurales en Villa Mayor, Marcos Paz y en General Las Heras. “El Plan integral de saneamiento ambiental es la herramienta estructural y ordenativa que nos tiene que definir las jerarquías y prioridades de las políticas que se llevarán adelante pero hay que incorporar lo aprendido, teniendo en cuenta que el objetivo principal permita mitigar los efectos del cambio climático”, aseveró.
Viveros con flora originaria
Maria José Parra, directora de Fortalecimiento Comunitario en Acumar, resaltó la importancia de realizar la audiencia en un espacio de memoria. “A casi 40 años de democracia, estamos aquí donde hubo horror y se quiere seguir planificando la vida, porque hablar de restauración ecológica es seguirla planificándola”, manifestó.
Parra aseguró que se cumplió con una primera etapa del saneamiento de la cuenca. “Hay acciones sostenidas en términos de políticas públicas para dejar de contaminar, hay que considerar que los territorios dentro de la cuenca son heterogéneos por lo que hubo que ampliar la mirada”, expresó. En este sentido, resaltó el trabajo que llevó a cabo Acumar en cuanto a fortalecimiento del entramado comunitario y social de la cuenca. “Impulsamos programas de creación y fortalecimiento de viveros de flora natural, esto apareció como una necesidad a la par de dejar contaminar, que exista flora nativa”. Asimismo, resaltó la creación de la Red de viveros de los municipios de la cuenca así como la producción de una guía para la gestión integral de viveros con plantas originarias y la concreción de 250 plantaciones a través de las cuales plantaron 20 mil ejemplares.
Lo que se logró en audiencias anteriores
Márquez, destacó la importancia de las que se realizaron de forma posterior a la pandemia. “En 2022 tuvimos dos audiencias, una sobre urbanización de las villas hacia nuevos paradigmas de navegabilidad y mejora de calidad del riachuelo”, contó. Asimismo, destacó que a partir de esa audiencia el Juzgado interviniente en la causa aceptó un primer tramo de navegabilidad del Riachuelo. “Pueden entrar los barcos hasta La Boca, eso fue un inicio para que junto a Turismo de nación pensemos en darle otra vida y uso social a la cuenca”, expresó.
Asimismo, mencionó la audiencia realizada en la primera mitad de 2023, en la que se debatió acerca de la calidad del agua, se compartieron datos y parámetros con respecto a 15 años atrás. “Falta un montón pero se van notando los progresos”, aseveró.
El cambio de paradigma que exige el fallo Mendoza, expresó Márquez, los llevó a encontrar referencias de saneamiento ambiental que proponen nuevos objetivos. De esta manera, por ejemplo, el año pasado se impulsó la mudanza del Mercado de hacienda de Mataderos. “Se dejó de volcar los deshechos orgánicos vacunos al río Cildañez y de ahí al Riachuelo y ahora está en Cañuelas con una planta de tratamiento de efluentes, eso ya no cae sobre el río”, indicó.
Respecto a la calidad del agua, mencionó que el Parque Industrial Curtidor en Lanús “va a garantizar el tratamiento de efluentes de varias decenas de curtiembres, entonces va a haber un control al efecto de que no se vuelva a volcar”, manifestó. De igual manera, resaltó el Sistema Riachuelo como una obra terminada, una planta de tratamiento de deshechos cloacales en Dock Sud: “Va a hacer que dejen de volcarse deshechos cloacales humanos al río, el 70% de la contaminación actual del Riachuelo son estos deshechos cloacales, este sistema los va a empezar a tratar y este escenario nos plantea nuevos horizontes”.
FUENTE: Gabriela Figueroa – www.tiempoar.com.ar