El Monumento Nacional a la Bandera, uno de los símbolos más potentes que tiene la ciudad de Rosario, será finalmente restaurado. Las obras, que habían sido anunciadas por Cristina Fernández de Kirchner en 2015 e iniciadas y paralizadas (por problemas presupuestarios) durante la gestión de Mauricio Macri, ahora serán retomadas por el gobierno de Alberto Fernández.
Pese al silencio oficial, el pasado 13 de julio se publicó en el Boletín Oficial el llamado a licitación y en la semana se oficializó el pliego con el detalle de las obras que la empresa adjudicataria deberá hacer en el plazo de nueve meses y con un presupuesto estimado en 530 millones de pesos.
Al tratarse de un monumento histórico, la empresa contratista deberá cumplir con el riguroso protocolo de restauración establecido por la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos.
Previo a la realización del pliego, hubo un minucioso trabajo de especialistas que analizaron la situación edilicia y también el estado de cada una de las obras de arte y símbolos que hay en el predio.
El detalle de los trabajos
“Se va a restaurar el basamento de la torre, el ascensor, la reja superior y toda la carpintería que hay en el interior. Además se pone en valor la fuente de proa con su sistema eléctrico, el mástil principal y los pasajes laterales”, explicó a Rosario3 la subsecretaria de Obras Públicas de Rosario, Jorgelina Paniagua.
Con respecto al trabajo dentro de la torre, las tareas principales tienen que ver con la impermeabilización y la “modernización” del elevador. Casualmente el dispositivo está averiado desde el inicio de las vacaciones de invierno y por el momento no hay fecha cierta para su reparación.
De acuerdo al proyecto de Nación, lo que se buscará hacer con el ascensor es incorporar un nuevo controlador de velocidad del dispositivo para “mejorar la prestación, logrando arranques, aceleraciones y paradas más suaves”. También se reemplazará el cableado del actual ascensor por uno nuevo con certificación antillama.
En el mirador la tarea principal será el cambio de la reja perimetral y la restauración de los telescopios que se utilizan para apreciar tanto la ciudad como el humedal. Además se renovarán las piezas de madera que hay en el lugar.
Con esta puesta a punto el sector delantero del Monumento va a quedar en condiciones y también los pasajes laterales sobre los que se van a realizar algunas tareas de impermeabilización que quedaron pendientes de la primera etapa de la restauración.
Además, se va a culminar también con las tareas de limpieza de los mármoles que recubren el Monumento, para eso ya se realizó un informe de especialistas en el que se detallan cada una de las patologías que tienen las placas y el tratamiento que deberán realizarle.
“Esta puesta en valor el Monumento tiene por objetivo garantizar su preservación y consevación en el tiempo”, detalló Paniagua. Es por eso que el trabajo integral trae aparejado también el retiro de la mayoría de las piezas de bronce que se ubican en los distintos sectores.
“El trabajo se va a centrar en el propileo con el desarme de los copones (ánforas) porque por allí entra humedad y es necesario tratarla”, añadió la funcionaria. También se van a retirar las estatuas de bronce que se enviarán a un taller especializado para su restauración.
Si bien todavía se desconoce dónde se limpiarán y restaurarán las estatuas, desde el municipio aclararon que tendrá que ser con expertos en arte y el trabajo del bronce que serán monitoreados por funcionarios conocedores del tema.
Entre las obras que se van a retirar se destaca la Llama Votiva, ubicada en el Propileo y que, según los técnicos, deberá trasladarse en una sola pieza hasta el taller y recién ahí desarmarse para la limpieza de cada una de sus partes.
Resta saber si para todo este proceso se apagará la simbólica llama que permanece encendida en “homenaje a quienes dan la vida por la Patria”, según detalla el sitio web del Monumento.
“Una vez que se retire, tenemos que ver cómo está la obra de gas y si es necesaria alguna reparación. La idea es que la llama se mantenga encendida, pero entendemos que si hay que hacer alguna intervención, este será el momento de tener que hacerla”, reconoció la subsecretaria de Obras Públicas.
En lo que respecta a las esculturas de piedra, no serán removidas de su ubicación, pero si se someterán a tareas de limpieza y puesta en condiciones.
Por último, el pliego publicado en el Boletín Oficial establece también la climatización de la Sala de las Banderas y la instalación de dos rampas para garantizar el acceso a personas con discapacidad tanto al patio cívico del Monumento como a la sala de Banderas. Para esto habrá que romper una parte de las escalinatas para montar ambos dispositivo.
“Hace dos años que estamos con este trabajo, apenas asumió Pablo Javkin la intendencia nos pidió que nos metamos de lleno en esta obra y desde ahí que venimos trabajando con Nación. Si bien nos sorprendió la publicación en el Boletín Oficial, estamos contentos de que se pueda concretar”, finalizó Paniagua.
FUENTE: Federico Gayoso – www.rosario3.com