Desde Acumar creemos que la navegabilidad es una gran oportunidad para la recuperación urbanística y cultural en la parte de la Cuenca Baja. La navegación y los puentes como punto de llegada pueden simbolizar las posibilidades de las políticas de Estado integrales: el río pertenece a la Nación, mientras que ambos extremos del icónico Puente Transbordador Nicolás Avellaneda se posan sobre la Provincia (Dock Sud, partido de Avellaneda) y la CABA (barrio de La Boca). Habilitar la navegabilidad del Riachuelo desde su kilómetro cero hasta el transbordador es imprescindible para poder recuperar su sentido y su identidad.
Comenzar a pensar en la vuelta de la navegabilidad con fines turísticos nos permite proyectar que en un futuro también se pueda establecer un punto donde converjan múltiples modalidades de transporte, con puentes, embarcaciones y automotores.
La recuperación de la Cuenca Matanza Riachuelo se encuentra atravesando una nueva etapa en la que vemos los avances y puestas en marcha de obras de gran envergadura: el Sistema Riachuelo, que tratará gran parte de los desechos cloacales que hoy se vuelcan al río; el traslado a Cañuelas del Mercado de Hacienda de Liniers, en mayo de este año; la mudanza de familias que viven a la vera del río; el avance en el Camino de Sirga, con pavimentación, iluminación y señalización, donde se proyecta la recuperación del paisaje con flora y fauna nativa; a lo que se suman las tareas de control industrial y de limpieza del espejo de agua que se realizan diariamente. Además, se han retirado del cauce principal 70 buques hundidos y más de 100 automóviles.
Para recuperar la navegabilidad, la identidad y el patrimonio histórico, natural y cultural de la Cuenca es necesario contar con la voz de quienes la habitan. Eso es lo más importante. Por eso, convocamos a participar de la Audiencia Pública que se hará el viernes. Tenemos la oportunidad de impulsar un hito para el Riachuelo, generar empleo verde vinculado al turismo sostenible, acercar a la comunidad al río y crear nuevas instancias de sensibilización y educación ambiental.
FUENTE: Antolín Magallanes – www.tiempoar.com.ar