Están en obra diversos desarrollos inmobiliarios que sobresalen del tejido urbano promedio. Algunos finalizaron, pero otros están a medio hacer.
Balvanera no está fuera del boom inmobiliario que empuja Buenos Aires hacia arriba. La Torre Saint, Casa Grimoldi, Casa Calise —y otros edificios de toda la vida— asoman como hermanos menores o “corchitos” ante nuevos desarrollos que están a la conquista de los cielos del Once.
El caso más emblemático es el flamante GrandView Hotel & Convention Center de Azcuénaga 45, casi Rivadavia. Es de la cadena Amérian Hoteles. Como su nombre lo indica, su activo principal es la altura. Se trata del desarrollo inmobiliario más grande de Balvanera y alrededores, con 26 pisos. Cuenta con 134 habitaciones de lujo, cinco salones, estacionamiento subterráneo y locales comerciales hacia ambas arterias. Abrió a fines de 2017 tras una inversión de $300.000.000 (de ese entonces) por parte de capitales coreanos de Grand View.
Como una biblia y un calefón, a escasos metros está la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera, fundada en 1833. Su presencia dio origen a este barrio. Junto al Colegio San José integran el Área de Protección Histórica N° 13. En el barrio también está la APH N° 34 del ex Mercado de Abasto Proveedor.
De vuelta a lo alto del cielo, hay que caminar hasta Hipólito Yrigoyen y Saavedra (a metros de Calise) para encontrarse con el edificio que el Banco de la Nación Argentina (BNA) empezó a construir en 2016 y que desde hace tiempo está sin avances. El terreno tiene 3.344 metros cuadrados y el cartel de obra estima que se harán 25.396 metros cuadrados de superficie cubierta nueva. La ejecución estructural está a cargo de Cavcon SA.
Se hicieron 11 niveles (con la altura de dos pisos cada uno). Se estima que iba a tener 27 pisos, siendo de lo más alto en la zona. Están construidas las columnas, los suelos y algunos muros. De lejos parece un gran esqueleto grisáceo.
Sobre un muro de Saavedra hay un render (imagen digital) colgado que muestra el proyecto final: un edificio vidriado con una terraza en forma de descanso y una cúpula inclinada que termina en un cartelón gigante con el logo del BNA. Otro render muestra la construcción de una plaza seca dentro del predio.
El objetivo del inmueble era para el archivo del banco y oficinas administrativas. Para atención al público en general está la sede de Rivadavia 2856, a dos cuadras y media.
Vecinos consultados por Abran Paso, que habitan y transitan la cuadra, dijeron que hace más de un año y medio se detuvo la construcción, es decir, la presencia constante de obreros y maquinaria. “Hace unas semanas vinieron a quitar los tabiques de madera y están desarmando los andamios”, señalaron.
Si uno camina por Yrigoyen y mira los muros internos, que dan al pulmón de la manzana, podrá observar que en los niveles anteriores a la retiración hay ventanas que tienen grafitis (Tags) a su alrededor. Esto confirma que en distintas ocasiones hubo gente que ingresó al lugar, pese a que hay vigilancia privada.
Los vecinos confirmaron que en más de una ocasión ha ingresado gente sin techo a pernoctar. También dormían sobre la ochava de Saavedra e Yrigoyen. “En una ocasión a uno le prendieron fuego las pertenencias”, contaron. De hecho la madera carbonizada todavía está entre los paneles que restringen el ingreso a la obra.
“Cuando empezaron a construir un edificio tan grande teníamos miedo que eso hiciera que aumentaran los alquileres en la zona o que quisieran tirar los edificios chicos de la cuadra de enfrente”, cuenta una comerciante a este medio y agrega: “Nosotros atendemos acá en planta baja, pero arriba hay un hotel y el mismo dueño tiene a su nombre toda la esquina. Si esto se encarecía teníamos miedo que venda para que hagan otros edificios más nuevos”.
Otro vecino cuenta: “Cuando empezó una obra así de importante nos pusimos contentos porque pensamos que con el movimiento iba a mejorar la iluminación y la seguridad de la zona, que es muy peligrosa no solo de noche. Ahora, con el edificio vació sentimos que es un peligro a toda hora”.
Si bien la zona de Once es marcadamente comercial, cada vez quedan menos lotes libres y todos se destinan para la construcción de nuevos desarrollos inmobiliarios de altura. El nuevo Código Urbanístico (que rige desde enero de este año) permite que en las avenidas lleguen a 38 metros. Lo más abajo es 22 metros entre lotes de San Luis, Viamonte, Paso, Lavalle y Riobamba; también entre Callao, Sarmiento, Mitre y Castelli. La información está disponible en la web oficial Plano Abierto del GCBA.
En este contexto de construcción, que ha modificado el perfil de zonas tradicionales como el Pasaje Carlos Gardel (que solo conserva de antaño los edificios Chanta Cuatro y Casa Pantano), el Gobierno porteño informó a través del documento Buenos Aires en Números N° 6 que la Comuna 3 de Balvanera y San Cristóbal es una de las más densamente pobladas de la Ciudad de Buenos Aires. Junto a la 5 (Almagro y Boedo) y 6 (Caballito) duplican el promedio capitalino: de 15.000 habitantes por kilómetro cuadrado las tres saltan a 30.000.
Por fuera de lo residencial y a tono con nuevas construcciones para entes públicos, en la esquina noreste de Combate de Los Pozos y Alsina desde 2015 se construye el complejo Producción, Administración y Archivo del Congreso de la Nación. En este tiempo se hicieron varios subsuelos. El cartel de obra indica que la altura proyectada es de 27 metros. El terreno tiene 1.134 metros cuadrados y se construirán en total 6.284 metros cuadrados. La empresa adjudicada para la obra es Zolmaco SA. El render que figura en el cartel oficial muestra un inmueble con el frente vidriado y terraza verde. Se muestra un rectángulo paralelo a Combate de los Pozos usado para tener una plazoleta destechada con canteros y bancos. No figura como de libre acceso, ya que está separada de la vía pública por un muro.
En el presente, el lugar está rodeado por paneles metálicos, donde están fijados los carteles oficiales de obra. Está instalado el obrador y están en su lugar las tabicaciones de madera. En lo alto hay banderas con la leyenda “UOCRA Presente”. Sobre la forma en que se hace este edificio dicen fuentes oficiales: “Se utiliza un sistema denominado “Pantalla de pilotes”, compuesto por 207 pilotes verticales ubicados en forma perimetral, excavación por etapas, ejecución de pilotes de tracción y submuración con tabique de Hormigón”.
En el sitio oficial del Congreso de la Nación se informa: “Es un desafío que responde a la necesidad de adecuar la estructura edilicia y funcional de la Imprenta del Congreso de la Nación a los avances tecnológicos y en materia de seguridad e higiene laboral producidos en los últimos 20 años. Es así que a fines del 2015, comenzó la ejecución de esta obra de gran magnitud, con el constante acompañamiento de ambas Cámaras Legislativas y del Sindicato que nuclea a los trabajadores Legislativos”.
“Con el financiamiento del Banco de Inversión pública, el edificio que fue ideado y desarrollado por y para los trabajadores del Organismo, tanto es así que llevará el nombre de uno de ellos, “Gustavo Antelo”, quien falleciera en un accidente en las Islas Malvinas en marzo de 2014. Permitirá una amplia variedad de tareas gráficas adicionales a las que actualmente se producen, la centralización de todas las áreas que están dispersas en varios edificios, incluyendo el Palacio Legislativo y asegurando un marco de trabajo seguro para sus empleados y beneficioso para la sociedad en su conjunto, ávida de conocimiento y de información de los actos de gobierno”.
Una buena para cerrar este paneo aéreo: Por estas fechas el Gobierno porteño repara la cúpula de la Confitería del Molino, hoy devenido Edificio del Molino. Por dentro se realiza un trabajo quirúrgico de restauración de suelos, techos, ornamentos. Incluso se convocó a la ciudadanía a donar objetos de la antigua Confitería (muchos entregaron latas, servilletas y demás objetos cotidianos que hoy revisten valor patrimonial). Por fuera, se acondiciona la estructura, se reponen los vitrales y se instala nueva luminaria. Además, está en proceso la reparación de la fachada en general, tras una exitosa experiencia en uno de sus laterales, sobre Rivadavia. En paralelo, está en reparación la fachada del Congreso de la Nación que da a la avenida Entre Ríos. Por todo esto, por estas fechas el cruce de Rivadavia y Entre Ríos-Callao bien puede llamarse la Esquina de los Andamios.
FUENTE: www.abranpasoradio.com.ar