“El colapso de la red eléctrica también se debe al descontrol sobre las megaconstrucciones de la ciudad”, advirtió Matías Barroetaveña, legislador porteño del Frente de Todos (FdT), sobre los masivos cortes de energía eléctrica que se produjeron durante la ola de calor de la semana pasada. Junto con otros diputados y diputadas del bloque opositor, Barroetaveña presentó en la Legislatura un pedido de informes para conocer si el Gobierno porteño cumple en controlar lo reglamentado por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) y el Código de Edificación de la ciudad, que con sus normativas establecen que las empresas constructoras deben reservar un espacio específico para instalar un Centro de Transformación (CT) en los edificios que superan los 60 kilo-voltiamperios (kVA) de demanda eléctrica.
El legislador explicó que con el pedido de informes se busca conocer si el GCBA realiza controles “para evitar que la multiplicación de los negocios inmobiliarios impacten saturando los servicios públicos”. En concreto, los y las legisladoras solicitaron información sobre la cantidad de proyectos inmobiliarios aprobados desde agosto de 2015 “que hayan incluido un local o espacio destinado al montaje de la instalación de un CT” y cuántos fueron rechazados por no incluirlos. Además, se consulta por la cantidad de inspecciones realizadas desde ese año y, en caso de haberlas realizado, si se han aplicado sanciones “debido al no cumplimiento del punto 3.9.2.4.1 del Código de Edificación”.
La fecha de agosto de 2015 no es azarosa, sino que responde a que en julio de ese año el ENRE publicó la resolución N°215, de cumplimiento obligatorio, que establece que “cuando se construya un local, edificio o agrupación de éstos cuya previsión de cargas exceda los 60 kVa o cuando la demanda de potencia de un nuevo suministro sea superior a esa cifra”, el propietario del inmueble debe poner a disposición de la distribuidora eléctrica correspondiente, ya sea EDENOR o EDESUR, “un local o espacio destinado al montaje de la instalación de un CT”.
El Código de Edificación porteño, en tanto, establece la misma obligación a partir de los 60 kVa, precisando que el espacio destinado debe ser “de las dimensiones y ubicación que la empresa distribuidora establezca para el abastecimiento del servicio”. Los CT reciben energía de alta o media tensión y la transforman en media o baja para su distribución final. Según explica el pedido de informes, basado en lo dictaminado por el ENRE, “si todos los usuarios no cumplieran con la normativa aplicable, el sistema de la red colapsaría causando graves daños en la calidad del servicio público de distribución prestado en la zona”.
Además, el pedido de informes precisa que “al tiempo de iniciar una obra el constructor tiene obligación de presentar el proyecto con los planos municipales ante el GCBA, los cuales deben ser previamente registrados y aprobados antes del inicio de la dicha obra”. Los planos presentados tienen que respetar tanto lo establecido por el ENRE como por el Código de Edificación y es el GCBA el que tiene que dar o no el visto bueno.
Una vez construidos los edificios, el Gobierno porteño tiene la obligación de controlar el cumplimiento de las normas para “salvaguardar la calidad del suministro eléctrico sin perjuicio de los requerimientos y posteriores verificaciones que realicen las empresas prestadoras del servicio”. “Como venimos denunciando, el gobierno de Larreta no cumple ni hace cumplir la normas de construcción, en este caso no estaría controlando que los edificios nuevos tengan espacio para la instalación de un centro de transformación”, indicó Barroetaveña en este sentido.
Durante los masivos cortes de luz que se produjeron la semana pasada en el AMBA, con picos de 700 mil usuarios afectados, la ciudad registró caídas del suministro de EDESUR en los barrios de Mataderos, Flores, Floresta, Parque Chacabuco, Villa Riachuelo, San Cristobal, Caballito, Villa Crespo, Villa General Mitre, Almagro y Parque Avellaneda, entre otros. En tanto, los usuarios de EDENOR se vieron afectados en Palermo, Recoleta, Saavedra, Villa Urquiza, Villa Ortúzar y Villa Pueyrredón.
FUENTE: Santiago Brunetto – www.pagina12.com.ar