Aun mes de conmemorarse el 105º aniversario de su apertura, avanzan los trabajos de restauración y puesta a punto de la Confitería del Molino. En este sentido, se está avanzando con las obras en los componentes del lugar, como bronces, muros y cielorraso, luminarias y pisos.
Actualmente, se trabaja en la restauración de los cielorrasos y vigas, como así también en la recuperación de los pisos de la tradicional Confitería del Molino. Previamente, se ejecutó un escaneo 3D de toda la superficie con el fin de determinar el estado del piso e identificar y mapear todas las piezas y sus patologías.
Posteriormente, se realizaron cateos estructurales que determinaron los sitios donde había que reforzar la estructura o restaurarla. Para reintegrar el solado se utilizaron piezas originales recuperadas por los arqueólogos, además de adquisición en antiguas marmolerías de placas símil originales, ya que el piso, en su mayoría, es de mármol.
En cuanto a los cielorrasos, y después de haber realizado la prueba piloto para su restauración, se han retirado los elementos “colapsables” y comenzado con la reposición y consolidación de sus componentes según técnicas de yesería artesanal.
Por otra parte, se desarrolla una primera etapa de puesta en valor de la marquesina, que abarca el sector ochava, Callao y Rivadavia y cuenta con un total de 160m2 de superficie de vitrales. Para ello se montó un taller en el cuarto piso donde parte del equipo de restauradores de la Comisión Administradora se encuentra realizando la limpieza, remasillado, recambio de plomos y refuerzo de los vitrales del sector ochava, que abarca unos 40 m2 de vitrales.
En la primera etapa de restauración de la marquesina se trabajó en 56 paños, 94 guardas, y 2 separadores. Los dos copones del frente se encuentran en regular estado de conservación, con uno o dos faltantes de piezas. Contienen 4 paños cada uno, 2 paños son geométricos, 2 paños son ornamentales con flores. De las 16 lámparas, dos que se encuentran en la ochava presentan signos de mal estado de conservación pero sin faltantes. En la parte superior de la marquesina, en tanto, se colocará una protección de vidrio laminado.
En cuanto a los componentes estructurales de la marquesina, la puesta en valor está a cargo de Astilleros Río Santiago, organismo dependiente del Ministerio de Producción de la Provincia de Buenos Aires. La misma incluye la restauración de vigas, ménsulas y la trama para soporte de vitrales con su correspondiente ornamentación metálica. Dicha estructura cuenta también con sus propios sistemas de desagüe e iluminación.
Según explicaban desde la Comisión Administradora “el trabajo de restauración de vitrales y el de la parte estructural de la marquesina están ligados, por lo que se está realizando un trabajo multidisciplinario entre las partes, necesario para la actualización tecnológica de sectores de la marquesina, para una mejor conservación y mantenimiento en el tiempo de los paños de vitral”.
Por otra parte, se están poniendo en valor los departamentos del cuarto y quinto piso del edificio, espacios donde funcionarán el museo de sitio y centro cultural del Molino. La restauración comprende los muros y cielorrasos, molduras en yeso, carpinterías de madera y vitrales.
Finalmente, se está completando la recuperación de los locales interiores de azotea e interviniéndose la cocina histórica y el salón anexo al principal del primer piso donde se descubrieron cielorrasos originales ocultos por intervenciones posteriores.
Tareas de restauración finalizadas
Se concluyó la restauración de la azotea y la Torre cúpula: recuperación de teselas, pintura a la cal de su interior, accionamiento de las aspas, reproducción de crestería y ornatos varios (mediante documentación fotográfica) e izamiento de los leones alados, que fueron replicados mediante modelización 3D.
También, se colocaron y retroiluminaron los 8 gajos de vitrales de la torre cúpula con un equipo de vitralistas externos. “El proceso comenzó a través de una convocatoria por redes sociales, se buscó información respecto de los colores y el diseño de los vitrales, ya que cuando iniciamos el proceso de restauración no quedaban rastros.
Con material fotográfico que donó la gente, el equipo técnico del Molino, logró reconstruir, tomando las trazas originales y desde el interior, sus colores y texturas vítreas”, explicaban desde la Comisión.
Datos técnicos de los vitrales de la Confitería del Molino;
– 8 gajos de vitral.
– 655 teselas por gajos
– 5240 teselas en total.
– Cada gajo tiene 5 M2.
Se utilizaron 25 tipos de vidrios diferentes, variedad de verdes, azules, amarillos, rojos, rosados, celestes, ambarinos, violetas, y morados.
La “nueva” fachada de la confitería
En cuanto a la fachada, se desarmó la totalidad de los 1800 m2 de andamio y se están terminando de ejecutar algunos detalles: recuperación de teselas vítreas en perímetros de ventanas y remoción de pinturas impropias. La intervención de las fachadas incluyó reposición de piezas faltantes y un proceso denominado nebulización para la limpieza del símil piedra.
También se ejecutó el refuerzo y reintegración estructural del balcón del quinto piso sobre Callao y se realizó la verificación estructural del resto de los balcones mediante técnicas como la gammagrafía (Tomografía edilicia) y cateos mínimamente invasivos.
También finalizaron las tareas de puesta en valor de la fachada de planta baja que incluye vidrieras, ornatos de bronce, cortinas de enrollar y revestimiento pétreo. En este caso, se incluyeron todos los componentes de la fachada sobre las avenidas Rivadavia y Callao desde el nivel de vereda hasta la marquesina y desde el acceso de Rivadavia 1815 a Callao 32
Finalmente, los salones de fiestas del primer piso se encuentran restaurados casi en su totalidad, a excepción de los pisos, que se ejecutarán al completar las obras del resto de los espacios en esa planta.
FUENTE: Claudio Corsalini – www.perfil.com