Hoy nos encontramos aquí celebrando un año más de nuestra querida ciudad, 149 años de historia. Una historia que se narra en cada espacio que recorremos a diario, en cada esquina, plaza y monumento. Somos nuestras calles y los pasos que en ellas hemos dado.
Me apasiona caminarlas y descubrirlas o reinterpretarlas. Hay tantos lugares que forman parte de nuestros paseos, escondidos bajo un manto de desconocimiento. Así fue como, en una caminata de domingo, surgió la idea en un espacio solitario y olvidado. Un emblemático edificio lo ocupaba, epicentro de un momento histórico en la ciudad, del que no quedaba rastro alguno más que un profundo silencio y el vacío de su ausencia. Una plazoleta sin identidad, sin vida, esperando, sin lugar donde sentarse…
La plazoleta es la que ocupaba el antiguo Club Mar del Plata, donde se encuentran la avenida Luro con el Boulevard Marítimo. Un triángulo verde sobreelevado de líneas sinuosas que contrastan con los maceteros de aspecto “vintage” ubicados en su espalda y atravesado por la intención de una baranda de la que poco queda.
Actualmente, es un lugar “deshabitado”, aturdido por los autos, que pasa desapercibido, como su historia.
El intenso movimiento del que disfrutó antaño se desvaneció no solo por el fuego que arrasara con el edificio el 10 de febrero de 1961, sino por cambios en el paradigma de la ciudad y la consecuencia en sus usos.
Me aterra el olvido, me hace pensar la falta de valor que otorgamos a aquello que nos antecedió. Hablar de la historia es mantenerla viva, es recordar quiénes somos, de dónde venimos, preservando así nuestra identidad cultural. ¿Y para qué sería importante eso? Para proteger el espacio que nos pertenece.
Hace unos meses, presentamos un proyecto de ordenanza en el Honorable Concejo Deliberante con el objetivo que sea identificada como Plazoleta Club Mar del Plata, resignificando el espacio, con ornamentación acorde a su época. El diseño incluye copones de la Rambla “francesa” y farolas del antiguo alumbrado, recuperados del dominio particular, mobiliario urbano y señalización con un antiguo cartel en hierro que narrará su historia, restaurados en talleres municipales.
Trabajamos cada día cuidando lo que es de todos. Amamos nuestra historia y los documentos que han quedado de ella y tomamos el compromiso de salvaguardarlos en una tarea que debemos hacer entre todos: cuidar lo nuestro, con el amor y responsabilidad que implica sabernos parte.
En el diseño de la Plazoleta Club Mar del Plata ubicada en la intersección de la avenida Luro y el Boulevard Marítimo Patricio Peralta Ramos, la ornamentación incluye piezas con valor histórico-patrimonial, todas de más de 100 años, restauradas en los talleres del Emvial. Los trabajos en el lugar comenzarán en el mes de marzo.
FUENTE: Costanza Addiechi – www.lacapitalmdp.com
