La ornamentación que diseñó el arquitecto italiano Virginio Colombo se estaba cayendo a pedazos. El riesgo no solo era edilicio, sino también para las personas que caminaban las veredas de la avenida Rivadavia, en Almagro, por los desprendimientos de materiales. El estado del edificio motivó la unión de los vecinos y la interacción con el Gobierno de la ciudad para definir una restauración urgente que hoy se ve finalizada. Así Casa Viacava, parte del patrimonio arquitectónico porteño, tiene una nueva vida, revitalizada por la intervención.
En sus 11 unidades funcionales habitan familias que, en 2018, se propusieron frenar el deterioro y avanzar en la restauración del edificio construido en 1917 que cuenta con protección estructural, es decir, la prohibición de demoler o realizar cualquier modificación en su fachada e interior. En la búsqueda de financiamiento acudieron al Ministerio de Cultura de la Ciudad y se pudo concretar su puesta en valor.
La idea comenzó a tomar forma en 2018 y se concretó durante la pandemia. La fachada cuenta con un trabajo decorativo que incluye figuras y ornamentos tallados en piedra, herrería artística y variedad de texturas y colores que se fueron perdiendo con el paso del tiempo. “No fue un trabajo fácil porque debimos ejecutarlo en plena pandemia, debido a los serios problemas estructurales de desprendimientos de ornamentos que se produjeron en el 2020. Es una alegría y un orgullo ver esta obra finalizada”, contó Margarita Aicardi, responsable del proyecto de la restauración de la fachada en representación del Consorcio de Copropietarios.
A través de la Ley de Mecenazgo, que permite que ciudadanos y organizaciones financien proyectos artístico culturales destinando aportes de Ingresos Brutos, se alcanzó el presupuesto necesario para costear la obra, inicialmente proyectado en unos 10 millones de pesos y aportados, en parte, por una empresa de seguros. El dinero se utilizó para frenar el deterioro de la fachada, restaurar barandas de hierro y ornatos, poner en valor los pisos y otros trabajos.
El Mecenazgo para la restauración fue solicitado por el consorcio del edificio y se completó con un segundo desembolso en 2020. El equipo de restauración estuvo a cargo de la arquitecta Elina Tassara, que ya había trabajado en la restauración de otro edificio del arquitecto Colombo y que, además, participó en la restauración de la Capilla Sixtina.
“La experiencia de realizar esta obra sirvió para consolidar una metodología de trabajo y un equipo de profesionales, técnicos, restauradores y artesanos que venimos trabajando desde hace muchos años en el país y en el exterior. Fue una experiencia distinta porque se desarrolló en pandemia, comunicándonos desde nuestras casas a través de videollamadas con aquellos que seguían en los andamios. Este trabajo servirá de ejemplo y motivación para que otros edificios históricos se puedan recuperar”, expresó la arquitecta.
El proyecto de recuperación es considerado un hito en la conservación del Patrimonio Cultural de la ciudad y de Almagro en particular. La puesta en valor de esta obra es tomada como una manera de reconocer la legitimidad de los valores urbanos, arquitectónicos, históricos y culturales de este tipo de construcciones.
A través de la Ley de Mecenazgo, más de 1200 proyectos fueron seleccionados para recibir el apoyo y sumarse a la actividad cultural de la Ciudad. Un 11,5% del presupuesto total que se destinó a los seleccionados fue otorgado a proyectos de Patrimonio Cultural con el fin de seguir trabajando en la recuperación y puesta en valor de edificios y sitios emblemáticos de Buenos Aires.
Características de autor
La Casa Viacava se caracteriza por su ornamentación con esculturas y molduras con motivos animales y florales. También porta herrería artística y diferentes texturas, construido a pedido de Francisco Viacava. En los planos originales la construcción figura como casa de negocios y de departamentos.
“La ciudad de Buenos Aires es el distrito con más herramientas para la conservación del Patrimonio, tanto tangible como intangible. Pero la protección del patrimonio se construye desde el consenso y la acción colectiva, y la restauración de Casa Viacava es un ejemplo virtuoso de trabajo en conjunto”, expresó, Emiliano Michelena, secretario general de la Comisión de Patrimonio Histórico.
“La obra de Virginio Colombo es de los mejores exponentes del art nouveau o liberty en la Ciudad y, como tal, la representación estética de las migraciones de principio de siglo XX que con trabajo y esfuerzo construyeron la clase media de la ciudad”, aportó.
El arquitecto Colombo dejó su impronta en Buenos Aires y la zona. Había nacido el 22 de julio de 1884 en Milán, Italia. Siendo aún muy joven fue contratado por el Ministerio de Obras Públicas de la Nación para realizar las decoraciones del Palacio de Justicia, razón por la cual se mudó a la Argentina en 1906 para ya nunca más volver a Europa.
Su final fue trágico. Tenía 43 años cuando el 22 de julio de 1927 apareció muerto con un disparo en su cabeza en su casa de Balvanera. En poco más de 20 años en el país tuvo un desempeño prolífico que le permitió dejar su sello personal en la construcción de 50 edificios en la ciudad y en La Plata.
Entre sus obras se encuentra el diseño del Pabellón del Centenario, uno de los 35 edificios construidos para conmemorar los festejos del primer aniversario de la Revolución de Mayo, proyecto que le valió una medalla de oro. La llamada Casa de los Pavos Reales, un edificio de rentas de 1912 de cinco pisos y dos bloques en Rivadavia 3216/24 y 3226/36, en Balvanera, es otros de sus trabajos reconocidos. También la Casa Calise, en el mismo barrio, y la sede de la Societá Unione Operai Italiani, en el microcentro.
FUENTE: Mauricio Giambartolomei – www.lanacion.com.ar