El Palacio Otamendi de San Fernando es uno de los edificios con más historia de la zona norte, y en las últimas horas el Municipio anunció cómo será la restauración para poder renovar su interior y transformarlo en un museo, y además sumarle en un edificio contiguo un teatro.
El proyecto de remodelación del edificio ubicado sobre la calle Sarmiento al 1400 preservará el palacio del siglo XIX, y buscará recuperar el encanto original de su estructura antigua, sus terrazas, jardines, y el mirador de la torre de 25 metros de altura para abrirla al público como museo y sitio de exposiciones.
“Es un sueño que vamos a lograr entre todos los sanfernandinos para cuidar el patrimonio histórico de la ciudad, crear una nueva casa para el arte y la cultura, y abrir un espacio verde para disfrutar”, manifestó el intendente Juan Andreotti sobre la restauración.
Además, en el lugar se creará un teatro para 500 espectadores, con tecnología de vanguardia. “Será una obra que cambiará la dinámica del día y la noche en nuestro casco céntrico, consolidando un polo cultural y gastronómico que genere empleo y ponga en valor al barrio”, sostuvo el intendente.
“Cuidar la historia también es preservar los monumentos que fueron testigos del crecimiento de San Fernando, y el Palacio Otamendi es un emblema, un tesoro legendario de nuestra memoria”, expresó.
Días atrás, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó el proyecto de transferencia a título gratuito del palacio al Municipio, para poder concretar las restauraciones y ahora sólo resta que el proyecto sea tratado en el Senado para convertirse en ley.
Según detalla el Instituto de Estudios Históricos de San Fernando de la Buena Vista, el edificio había sido construido por Joaquín M. Belgrano, uno de los descendientes de Carlos Belgrano, hermano del prócer Manuel Belgrano, en el último tercio del siglo XIX. Durante mucho tiempo fue la más alta construcción cerca de la plaza Mitre. La edificación tiene un estilo del renacimiento alemán, con líneas que la asemejan a un castillo. Al ingresar a la casa, se observan todavía los restos de un piso veneciano en colores ocre y bordó, que forman figuras con una guarda perimetral.
Con el correr de los años el edificio funcionó como un asilo de niñas y jovencitas bajo el nombre de Estela Matilde Otamendi. En 1934 las Hermanas de los Santos Ángeles Custodios se hicieron cargo del lugar por unos 14 años. Al iniciarse la década de 1950, el edificio pasó a manos del Estado Nacional, que estableció allí el Instituto “Estela Matilde Otamendi”, dependiente del Consejo Nacional del Menor y la Familia.
En 1999 el Palacio Otamendi fue declarado bien Patrimonial del Municipio de San Fernando por medio de la Ordenanza 7293/99, por considerarse un hito destacado de la ciudad tanto en su riqueza arquitectónica, urbanística, paisajística y ambiental.
En el año 2001 el histórico Palacio pasó a la órbita del Municipio hasta 2007, cuando quedó en manos de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Nación (SENAF), y se firmó un convenio para que la Universidad de Buenos Aires se hiciera cargo desde el 2011 a 2016. Concluido el acuerdo el inmueble volvió al dominio de la Secretaría.
Actualmente el Palacio es considerado Patrimonio Cultural y Arquitectónico, y desde 2016 permanecía administrado por la AABE.
En 2017, el palacio sufrió un incendio que destruyó gran parte de los techos del lugar y que, según declaró un cuidador del lugar, fue producido por “okupas” que ingresaron a la casona. Desde el 2018 el Municipio de San Fernando tomó intervención del Palacio Otamendi realizando tareas de limpieza, desmalezado y protección del inmueble. Un año después, durante la gestión del presidente Mauricio Macri, fue ofrecido desde la AABE conducida por Ramón Lanús a la inversión privada bajo la figura del Derecho Real de Superficie, algo que finalmente no se llevó a cabo.
FUENTE: www.quepasaweb.com.ar