En el contexto demarcado por la pandemia, el Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo (CPAU) convoca a una reflexión que permita un aporte profesional y ciudadano sobre los “Intersticios Urbanos”.
“Nos referimos a áreas públicas en las que se producen discontinuidades por destinos inadecuados o indefinidos; espacios sin ninguna función o con usos inconvenientes que rompen la continuidad de la ciudad caminable, que separan y dividen, que generan vacíos urbanos”, dicen las bases.
La escala de la intervención es abierta y el área es, principalmente, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Puede ser un proyecto u obra construida, el desarrollo de nuevas actividades (programática) o una presentación normativa.
La convocatoria está dirigida a arquitectas y arquitectos con matrícula del CPAU o equipos interdisciplinarios que incluyan una persona matriculada.
La Comisión de Arquitectura del CPAU invita a pensar en conjunto el paisaje de la Ciudad, en lo que puede ser a la vez una contribución al futuro, un aporte constructivo y un estímulo en medio de las tensiones generadas por la pandemia.
Las bases de la convocatoria
Según las bases “la idea de intersticio se proyecta a la posibilidad de superar vacíos y barreras en la continuidad de la ciudad como espacio caminable, marcado por vías de alta velocidad, por cruces de difícil acceso peatonal,
por pérdida de la continuidad en el arbolado urbano, por su desarticulación entre los sistemas de plazas y parques,por la pérdida de perspectiva del sistema natural de ríos urbanos (e inclusive de los ferrocarriles como ríos urbanos).
Tal vez, un inicio sea localizar y registrar estas situaciones incompletas, conflictivas, equivocadas y hacer su diagnóstico para proponer su reformulación”.
La presentación de trabajos es libre, requiere inscripción previa, y las propuestas se deben cargar en la web del CPAU, www.cpau.org.
El cierre es el jueves 29 de septiembre. El fallo del jurado se conocerá el 28 de octubre y la certificación de los trabajos seleccionados será el 10 de noviembre.
FUENTE: Graciela Baduel – www.clarin.com