Dentro del Concejo Municipal están promoviendo el plan especial Barrio Inglés, un proyecto que pretende poner en valor los dos complejos habitacionales que integran ese atractivo enclave de dos manzanas irregulares cercanas al parque Scalabrini Ortiz. Esta iniciativa legislativa, apuntalada por los ediles Roy López Molina y Agapito Blanco, busca encuadrar ese sector histórico dentro de una planificación urbanística moderna y que satisfaga las necesidades actuales de los habitantes de esas unidades residenciales, que conforman un eslabón importante del pasado ferroviario de la ciudad.
“La primera intención del proyecto es la recomposición urbana del área, siempre teniendo en cuenta la importancia y el valor arquitectónico de los dos complejos de viviendas, tanto el Morrison Building como el Batten Cottage. Notamos un gran nivel de deterioro, no solo de las viviendas sino de todo el entorno”, comentó López Molina.
Y confió: “Sabemos que no es un planteo nuevo y que hubo otras iniciativas en el Concejo y del Ejecutivo, pero siempre quedaron en la nada”.
“El año pasado, nosotros presentamos un proyecto que tiene que ver con un plan especial donde se definen indicadores urbanísticos para el lugar, pero además nos involucramos con la puesta en valor de todo el sector. Sobre todo, en esa zona verde, que es el parque de los Ferroviarios, que está muy venido a menos”, puntualizó el concejal.
Y precisó: “El proyecto fue visto por el Ejecutivo, que emitió una opinión favorable en la última reunión en la comisión de Planeamiento. Nosotros solicitamos la ampliación de algunos puntos de ese informe, pero ya decididos a comenzar la discusión sobre cuestiones concretas del proyecto”.
“El Estado no colabora”
En ese marco, López Molina remarcó que “las viviendas están catalogadas a nivel patrimonial y tienen un grado de protección muy importante. Eso lleva al privado a tener restricciones en el uso de su propiedad pero, por otro lado, tampoco el Estado colabora en mantener su valor histórico y arquitectónico. Con los vecinos nos comprometimos en avanzar en este proyecto para poder revalorizar el barrio”.
En ese sentido, advirtió que “hay que intervenir en la zona del parque de los Ferroviarios (N. de la R.: aledaño a las viviendas), porque no hay ninguna barrera arquitectónica de protección, que podrían ser pretiles, pequeñas columnas, mobiliario urbano, o algún tipo de obstáculo que impida a los autos particulares que suban y lo usen como estacionamiento público por quienes van al parque Scalabrini Ortiz. Ese es un reclamo actual de los vecinos”.
El edil también apuntó que hay que desactivar las picadas en la zona. “Otro punto que hay que abordar tiene que ver con las condiciones de abandono que sufre el lugar y las picadas clandestinas, que ahora se meten por Agustín Tosco, que es una pequeña calle de dos cuadras, entre los complejos de viviendas, y representan un riesgo enorme para la seguridad de los vecinos”.
“También vamos a pedir informes acerca del cumplimiento de las compensaciones que tenía que pagar una empresa, cuyo destino era Morrison Building. Hay que encontrar fuentes de financiamiento para poder llevar adelante esta puesta en valor que necesita todo el barrio”, confió López Molina.
FUENTE: Aníbal Fucaraccio – www.lacapital.com.ar