La geoingeniería podría ser una herramienta urbana clave para mitigar los efectos del cambio climático. Empieza por plantar árboles y termina por liberar aerosoles en la atmósfera para bloquear la irradiancia solar. ¿Usaremos geoingeniería en nuestras ciudades?
¿Qué es la geoingeniería o la ingeniería climática?
La geoingeniería es la manipulación de los sistemas de la Tierra mediante el uso de tecnología. Estos sistemas son la atmósfera, el océano y los suelos. Bajo esta definición no es muy difícil entender que llevamos varios milenios ingeniando (a menudo sin un objetivo claro) estos sistemas.
El cambio climático antropogénico, la acidificación del océano y la alteración del ciclo del nitrógeno dan cuenta de ello. Incluso sabemos que la civilización puede haber logrado alterar la atmósfera a finales del siglo XVIII o que la deforestación y agricultura preindustrial (hace 7.000 años) ya alteró considerablemente la composición atmosférica .
¿Cuál es el objetivo de la geoingeniería?
Dicho esto, la inasumible contaminación atmosférica actual no se considera como intencionada, y por tanto no suele hablar de ella como geoingeniería. De hecho, es un término usado únicamente como ‘solucionador’ de problemas ambientales. Existen dos grandes tipos de geoingeniería:
1. Secuestro de carbono de la atmósfera
El secuestro de carbono es un método por el cual se captura CO2atmosférico y se almacena de forma segura. Evidentemente, los mejores sistemas son los sumideros de carbono vegetal y coralino : plantar árboles en las ciudades y dejar de calentar y acidificar el océano.
Pero también hay métodos artificiales, mucho más rudimentarios y aún muy poco eficientes, que ya han logrado atrapar CO2. El problema de estos métodos es que son muy caros y muy poco efectivos. Los árboles lo hacen mucho mejor, y gratis. Además, refrigeran las ciudades y atraen biodiversidad.
2. Gestionar la radiación solar
Usar espejos gigantes que maximicen el albedo de la superficie, bloquear la radiación solar con una sombrilla espacial o alterar (muy ligeramente) la composición de la atmósfera son algunos ejemplos para reducir la temperatura global. De momento esta ingeniería climática apenas se usa.
El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) ha manifestado en varias ocasiones que hace falta más investigación para probar a escala planetaria estas soluciones, y que la primera y más efectiva es dejar de emitir CO2a la atmósfera. Aunque hay dos problemas: quizá con dejar de emitir no baste, y se prohíbe experimentar.
¿Pir qué no se usa geoingeniería a gran escala?
Existen dos motivos principales por el que la geoingeniería no se aplica. El primero tiene que ver con la falta de conocimiento general de la población , que presiona en contra de cualquier experimento. El segundo tiene que ver con la falta de conocimiento de los propios científicos , ya que no poder realizar estos experimentos imposibilita plantear escenarios y objetivos.
Ambos son miedos coherentes porque la atmósfera no es un sistema lineal y es muy difícil predecir su comportamiento. Esto lo estamos viendo con los niveles de CO2atmosféricos: se teme incluso que el calor absorbido por el planeta libere metano y genere un cambio climático autoalimentado. Pasado cierto nivel de contaminación, el planeta se ‘contaminará’ solo.
En 2021 se volvía a pausar el experimento de SCoPEx, un proyecto de 2014 liderado por la Universidad de Harvard que pretendía lanzar a la atmósfera pequeñas cantidades de carbonato de calcio con el fin de reflejar una pequeña fracción de la luz solar de vuelta al espacio. Se espera poder reactivar el proyecto en los próximos meses.
FUENTE: M. Martínez Euklidiadas – tomorrow.city