El Aliviador III forma parte del complejo sistema hidráulico que se construyó en los subsuelos de Rosario tras la gran inundación de 1986 que dejó al barrio Empalme Granero y gran parte de la zona noroeste de la ciudad bajo el agua. Para evitar otra tragedia se construyeron cuatro grandes conductos que confluyen en las desembocaduras del arroyo Ludueña con el Paraná,
Sin embargo, todo esta red de presas entró en zona de riesgo por un mega emprendimiento inmobiliario en la localidad de Funes (límite oeste de Rosario) cuyo principal inversionista es el ex jugador de Newell’s y de la Selección, Maximiliano Rodríguez.
El emprendimiento lleva como nombre comercial Estancia Deportiva Damfield, un complejo deportivo de alta gama que ahora tiene proyectado incorporar un barrio cerrado. Ocurre que el predio de 70 hectáreas está ubicado dentro de los límites “del vaso de almacenamiento del embalse”, según advirtió un estudio técnico al cual accedió La Política Online.
Es que para desarrollar el plan que los inversionistas presentaron al Concejo Municipal de Funes, es necesario elevar el nivel del terreno que forman parte de la “Presa de Retención de crecidas de Arroyo Ludueña” cuyo cálculo se hizo en base al régimen de lluvia de los últimos cien años.
Lo preocupante, señalan los especialistas hidráulicos consultados por este medio quienes pidieron preservar sus nombres, es que el proyecto tiene el aval de la ministra de Ambiente de la provincia, Erika Gonnet, y del intendente de Funes, Roly Santacroce, quien giró el expediente al Concejo de esa ciudad.
El tema es sumamente delicado porque esos terrenos tienen un rol fundamental para que Rosario no se inunde como ocurrió en la tremenda crecida del Ludueña del ’86 permitiendo el almacenamiento del agua cuando las lluvias superan la recurrencia de los 100 años y hace que el desagote por el vertedero se haga de manera más lenta y no se sature, explicaron los expertos a LPO.
Es que el proyecto inicial que tenía Maxi Rodríguez para esos lotes consistía en un gran complejo deportivo, con canchas de fútbol, hockey, tenis, paddle, rugby y un moderno Fitness Center, entre otras disciplinas que en principio no representaba un movimiento de suelos ni infraestructura significativa.
Pero ahora, con el nuevo country se prevé elevación de tierras lo cual va a generar obstrucciones en el recorrido natural del agua e impermeabilizar grandes zonas lo que pone en riesgo el sistema del Aliviador III, una enorme obra que se inició en 2012, que protege a una población que supera al millón de habitantes, y que con ella se terminó de conformar el sistemas de grandes cañerías de los Aliviadores I y II, el Conducto Olivé y la Presa de Retención de Crecidas del Arroyo Ludueña, esta última es la que se pone en peligro con este emprendimiento.
Estás obras, algunas realizadas hace más de 30 años, se habían vuelto insuficientes para su caudal en los picos de crecida y por ello se proyectó el Aliviador III como un by pass, drenando el exceso de caudal del arroyo Ludueña cuando éste crece en forma extraordinaria por las fuertes lluvias superando su nivel habitual.
A partir de allí, el agua ingresa al túnel de hormigón de 5 metros de diámetro, preparado para desagotar 60 mil litros por segundo. Una capacidad suficiente para controlar los desbordes y las inundaciones y su construcción la hicieron 130 operarios que trabajaron las 24 horas durante 40 meses en los que excavaron 50.000 m3 de tierra y volcaron 15.000 m3 de hormigón, convirtiendo al Aliviador en la obra hidráulica más importante de las últimas décadas.
De hecho, cuando se proyectó el country Kentucky, el más exclusivo del Gran Rosario, los desarrolladores tuvieron que recortar la superficie porque en el plan original se avanzaba sobre los terrenos de reserva.
FUENTE: Fabricio Navone – www.lapoliticaonline.com (Santa Fe)