Los corredores gastronómicos al aire libre surgieron a finales del 2020 como una alternativa planteada por el municipio para paliar la crisis que provocó en el sector la pandemia de Covid-19.
Frente a este panorama, distintos bares, restaurantes y cafeterías pudieron comenzar a instalar decks con el objetivo de ofrecerles a sus clientes ambientes ventilados, donde disminuyen las probabilidades de contagiarse de coronavirus.
La medida fue bien recibida por los comerciantes del rubro, que lograron seguir trabajando en un contexto de pandemia, y por marplatenses y turistas, que encontraron en estos sitios la chance de continuar disfrutando de la gastronomía local en un ambiente seguro.
Sin embargo, la pandemia se extendió en el tiempo y los decks continuaron funcionando por más de un año, lo que despertó la preocupación del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires Distrito IX, desde donde manifestaron que algunas de estas estructuras están construidas de manera “precaria”, lo que representa un “riesgo importante” para la seguridad pública.
El protocolo del plan “Comemos Afuera” fue prorrogado recientemente por el ejecutivo municipal y desde el Colegio de Arquitectos expusieron, a través de un comunicado, sus críticas por la manera en la que se está implementando el mismo.
“Si bien compartimos las medidas tendientes a disminuir el impacto de la pandemia sobre el sector gastronómico, advertimos una desacertada interpretación de la medida por parte de los empresarios del sector y una ausencia de control municipal sobre los permisos otorgados”, indicaron en el escrito.
Asimismo, aseguraron que se relevaron “situaciones preocupantes respecto del uso del espacio público; como techar amplias superficies de vereda desde la línea municipal de los locales gastronómicos” y que se verificaron que “los anchos de plataformas superan los permitidos, ocasionando problemas de seguridad vial”.
Inquietud
“Desde nuestra institución lo que hicimos desde el primer momento en que el plan se puso en marcha fue solicitarle al gobierno municipal la participación de profesionales competentes”, declaró al respecto el presidente del Colegio de Arquitectos, Eduardo Agüero, en diálogo con LA CAPITAL y remarcó que los decks gastronómicos son estructuras que se instalan sobre la vía pública y en lugares de alto tránsito peatonal.
En este sentido, aclaró su principal inquietud acerca de estas plataformas es que “se han hecho con materiales que son atacables por el clima marítimo, como es el acero común, y en algunos casos se han incorporado superficies que ofrecen resistencia al viento y en nuestra ciudad tenemos cada tanto un eventual temporal de viento fuerte”.
“Esto hace que un corto o mediano plazo representen un riesgo importante para la seguridad pública”, alarmó.
Además, Agüero hizo hincapié en cómo se descuidó “el cuidado del paisaje urbano”. “Cada uno hizo lo que pudo, lo que quiso y en definitiva no se terminan cuidando las cuestiones paisajísticas en una ciudad turística y tenemos que ser cautelosos con eso porque es parte de lo que le ofrecemos a los visitantes”, marcó.
En este sentido, el presidente del Colegio de Arquitectos agregó que “al no tener ningún tipo de estandarización, en algunos casos no respetan los anchos previstos” y detalló que estos pueden ser, como máximo, de hasta 2.50 metros en una calle mayor a 10 metros y de 2 metros en calles menores a 10 metros.
Piden revisión
“Uno transita por estos corredores y ve que cada uno tomo un poco como le pareció. Seguramente que también ahí el control municipal ha sido deficiente”, consideró Agüero.
Además, sostuvo que como el plan “se implementó con urgencia, le dejaron hacer a cada uno lo que pudo”. “Los decks se construyeron como estructuras provisorias, pero el paso del tiempo y la extensión de este programa hace que esto sea cada vez más riesgoso”, dijo.
A su vez, señaló que las estructuras “no tienen las protecciones contra la corrosión que merece nuestro clima”. “Con pintura anticorrosiva no alcanza con una estructura que va a estar dos o tres años. Otros son los tratamientos que se deberían haber utilizado y que se deberían exigir”, consideró.
“Nosotros planteamos al municipio hace más de un año la necesidad de participación de profesionales -recordó-, que es lo que garantizaría un responsable que haga los cálculos estructurales y especifique que materiales se deben usar. En este caso, nada de eso se hizo”, lamentó.
Por último, Agüero adelantó que solicitarán una reunión con las autoridades para tratar este tema.
“Seguramente cuando nosotros instalamos el tema estaban viendo más la urgencia del sector gastronómico, que es entendible, por supuesto, pero ya pasó más de un año de este programa y creo que es un tiempo razonable para revisar lo que se hizo”, concluyó.
El protocolo
El protocolo del Plan Comemos Afuera indica que las áreas gastronómicas sobre espacios públicos no deben intervenir en accesos a estacionamientos o garages; espacios de carga y descarga; estacionamientos reservados; espacios de contenedores de basura; espacios de otros locales gastronómicos; rampas y sendas peatonales, o similares.
Además, se remarca que está prohibido que se ubiquen a menos de cinco metros de los límites exteriores de establecimientos médicos, policiales, estaciones de bomberos, bancos, oficinas públicas, y similares.
Tampoco pueden instalarse a menos de cinco metros de lugares reservados para la detención de vehículos de transporte público de pasajeros, fuera de los límites correspondientes al local habilitado, salvo que se cuente con la respectiva autorización de los propietarios de inmuebles linderos, ni en zonas de alta siniestralidad o alto tránsito, salvo que presenten de medidas paliativas de estas.
“Las infracciones al Protocolo serán pasibles de las sanciones establecidas el Código de Faltas Municipales”, se indicó en su momento desde la comuna.
FUENTE: www.lacapitalmdp.com